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'Toc Toc'

Vaya por delante que yo no tengo, al menos diagnosticado, ningún trastorno obsesivo compulsivo, por eso mi crítica de Toc Toc es como una mera espectadora. En un viaje en tren vi esta película de 2017 sobre un grupo de pacientes con diferentes trastornos que esperan en la sala de espera, valga la redundancia, a ser atendidos por un prestigioso psiquiatra.

Durante toda la película tuve una sonrisa en la cara, aunque también hay momentos agridulces, pero es una comedia que busca entretener y lo consigue “a costa” de contar el día a día de personas con TOC.

No voy a hacer una crítica cinematográfica al uso, aunque los actores lo hacen todos muy bien (me gustan mucho Alexandra Jiménez y Rossy de Palma), lo que me gustó de 'TOC TOC' es que nos enseña como se convive con un trastorno obsesivo compulsivo. Es una película, claro, no vamos a pedir peras al olmo, y los personajes sufren situaciones de lo más surrealistas, pero no ridículas. No se ridiculiza al enfermo, al revés, se crea una empatía con él. Son personas normales con una peculiaridad, podríamos ser mañana cualquiera de nosotros y por eso te ríes con ellos, sí, pero también sufres con ellos. Me pareció una película muy respetuosa a pesar de ser una comedia.

Por otro lado, cada uno tiene su opinión, pero creo que también ayuda a los enfermos y a sus familiares a darse cuenta de que es algo con lo que se puede lidiar, aunque sea duro. En la serie 'Girls', la protagonista tiene un TOC que incluso la lleva a herirse a sí misma, es muy angustioso verla y eso no ocurre en esta película.

Tienen TOC, sí, pero trabajan, se divierten, se enamoran... Son personas con un problema.

El mensaje es el mismo de siempre, las enfermedades (o trastornos) mentales, son eso, enfermedades, y por muchas tazas de Mr. Wonderful que te regalen no te vas a curar. La película, aunque caiga en tópicos porque, insisto, es una película no un documental, es respetuosa con los variopintos personajes, y estos, a su vez, sólo quieren ser felices. ¿Y quién no quiere eso, ser feliz? Con TOC o sin él nuestras pretensiones son bastante parecidas.

Y lo más interesante es que te hace pensar. Cuando acaba la cinta reflexionas sobre si tú serías tan fuerte como ellos, sobre cómo tratamos como sociedad a quienes padecen un trastorno obsesivo compulsivo y sobre... como verías esta misma película si estuvieras obsesionado con la limpieza o los números.

Os la recomiendo y espero vuestros comentarios, buenos y malos.

Talía Nieto Hernández

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